Todos los 24 y 31 de diciembre en los diferentes estados de Venezuela, sus habitantes suelen colocar hallacas, pan de jamón, ensalada de gallina, pernil y un sin fin de frutas y bebidas para así celebrar dichas fechas en familia, pero este año muchos han tenido que elegir entre la comida del día a día o sólo pasar una noche agradable en la mesa.
Las familias maturineses actualmente trabajan para sobrevivir el día a día, pues la inflación los ha puesto contra la pared, debido a que un sueldo mínimo ya no alcanza ni para cubrir el gasto de una comida diaria.
“Cada vez es más difícil, los alimentos cambian de precio a diario, si compramos el arroz, no nos alcanza para el pollo o la carne, por eso dificultamos que todos los maturineses puedan hacer en sus hogares la tradicional cena navideña”, expresó la ciudadana Laura Chacón.
En este sentido, el maturinés Luis Alberto Cova, dijo que los ingredientes para preparar las hallacas también están incomparables, pues un kilo de carne de cochino se ubica en 4 o 5 dolares, lo que equivale hasta 25 millones de bolívares.
“Muchos realizarán cenas en sus casas pero no la tradicional, pues no cuentan con los recursos, ya en Venezuela se ha perdido la tradición por el problema económico que hasta la fecha no ha perdonado a nadie”, finalizó Cova.
Redacción: Gabriel Brito Piñango
Periodista
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