Han pasado días, semanas, meses y más de un año y medio desde la promesa de los nuevos gobernantes del estado Monagas y la ciudad de Maturín, quienes se comprometieron a brindar una atención integral a los vecinos del sector Santa Inés, promesas que sólo se han quedado en palabras, debido a que la comunidad aún sigue sumergida en calles de tierra, que al llover se convierten en vías de charco que se vuelven intransitables.
Los vecinos de dicha comunidad aseguran sentirse decepcionados, pues creían en el lema “Vamos a Cambiarlo Todo”, pero aseguran que es uno más del montón.
“Nada va a cambiar si en el poder siempre están los políticos que velan por sus intereses, por vestir bien, por tener buenos carros y casas lujosas, mientras es el pueblo que pasa las calamidades. Queremos vivir en una zona donde hayan calles asfaltadas, buenas luminarias, seguridad y mejor servicio de agua y energía eléctrica”, destacó la vecina Paula Cáceres.
Por otra parte el vecino Alfredo Guatarasma, precisó que desde hace más de 10 años les prometieron asfaltas las calles transversales y hasta la fecha no han recibido respuesta.
Además, indico que la comunidad se ha convertido en una boca de lobo, debido a la falta de alumbrado público.
“Los mismos vecinos han tenido que colocar bombillos en los frentes de sus casas para mantener la zona alumbrado, nos tienen abandonados, pero deja que se acerquen las elecciones que ahí si buscan de meterse para las comunidades”, dijo Guatarasma.
Ante está situación, los afectados hacen un nuevo llamado a la Alcaldesa de Maturín y al Gobernador de Monagas para que atiendan sus solicitudes.
Periodista
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