Una avalancha blanca calentó nuevamente las calles de la parroquia Boquerón del municipio Maturín, desbordándose la esperanza por una nueva Venezuela, de prosperidad y desarrollo,
Una avalancha blanca calentó nuevamente las calles de la parroquia Boquerón del municipio Maturín, desbordándose la esperanza por una nueva Venezuela, de prosperidad y desarrollo,