Al ritmo de la Soca y el Calipso, más de 5 mil personas, propios y visitantes, despidieron el Carnaval, en la tradicional octavita, que se celebra desde hace más de 50 años en el municipio Santa Bárbara de Tapirín, que lleva por nombre Bandera Negra.
La tradición consiste en el desfile de trajes coloridos y de agrupaciones que ponen a bailar a los asistentes con un ritmo particular, donde durante el recorrido, se dispersa agua a través de camiones cisternas.
“Una tradición que a lo largo del tiempo a cobrado más fuerza, pues recibimos en el municipio a personas de otros estados cómo del Oriente y del Occidente, que vienen juntos a sus familias a bailar, a disfrutar en armonía”, expresó la alcaldesa de la jurisdicción Carmen Tillero.
Los asistentes, que son nativos de esta localidad, recorren las principales avenidas del municipio, que son la ruta del evento, con una bandera negra en sus manos, que los hace recordar su cultura y origen.
La alcaldesa Tillero, también resaltó que contaron con la presencia de más de 6 agrupaciones de Calipso y Soca, de diferentes partes del país, y con el apoyo de más de 350 funcionarios tanto policiales como de prevención para la seguridad de los lugareños.
Periodista del estado Monagas.
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