Un grupo de delincuentes pertenecientes a la banda de “José Cacho”, se ensañaron contra el comerciante Oswaldo Bassa Guerrero: le propinaron un tiro en cada tobillo, le abrieron el abdomen para extraerle las vísceras, lo castraron y degollaron.
Antes del asesinato, que ocurrió el pasado 15 de marzo en el sector El Bosque de la parroquia Coche, el hombre de 47 años de edad, recibió varias amenazas de parte de los criminales, para que les cancelara un monto semanal. Sus familiares denunciaron que miembros de un consejo comunal de la zona, también lo presionaron para que pagara, ya que recibieron las mismas advertencias.
Su cadáver fue hallado en la zona cuatro días después, funcionarios de la Brigada Contra Homicidios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), levantaron el cuerpo y lo llevaron a la morgue de Bello Monte. Una comisión inició las averiguaciones para dar captura a los victimarios.
Cuando delincuentes abordaron a Bassa Guerrero, este se encontraba con uno de sus hijos, a quien dejaron ir. Al recibir las amenazas, la víctima se negó a cancelar la vacuna, asegurando que no le alcanzaba lo que percibía semanal para pagar a proveedores, obtener una ganancia y además, cancelar esta extorsión.
Vecinos de la zona denunciaron que la banda de “José Cacho”, está compuesta por alrededor de 30 hombres. Los antisociales mantienen en vilo a pequeños y medianos comerciantes de la parroquia Coche, ante la imposición de pagos de vacuna. Son constantemente amenazados con la muerte de ellos o algún familiar, de no recibir el dinero.
Con información de El Pitazo
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